jueves, 31 de marzo de 2011

El universo sobre mi...

Queda una hora antes de que mi 20º cumpleaños termine y no podía haber terminado peor...Desde que corté a Daniel he estado itentando convencerme que realmente soy importante para alguien más y al parecer para mi familia no soy muy importante, hace una hora decidí irme a dormir después de esperar un buen rato en la tarde a que llegara mi papá para ir a cenar...Llegó mentando madres por que yo había decidido irme a dormir y ni siquiera vino a mi cuarto a preguntarme como estaba.
Esas son las cosas que más extraño de Daniel y en realidad que más quiero para mí, sentirme importante y querido en algún lado. Qué no se supone que tu famila siempre está ahí cuando la necesitas?

Que en tu cumpleaños lo único que hay que hacer es soplar las velas del pastel y que te lleven a algún lugar bonito a cenar? Que la gente te haga notar el gusto que les da festejar contigo? No gritos en la sala argumentando "No es mi culpa" "Y ahora por qué llora?" Y si me mueriera mañana? O mis papás? Eso sería todo? Gritos y peleas?
Y por otro lado, por qué aún guardaba la esperanza de que Daniel decidiera levantar esta "ley del hielo" solo por ser mi cumpleaños? Por qué a pesar de su explícito deseo de seguir con su vida sin que seamos amigos esperaba un "Felicidades, chamaco" en mi mail? Por qué no puedo olvidarlo? Por quñe sigo esperando cosas que la gente no va a hacer?
Es acaso mucho pedir un cumpleaños lindo? A veces me siento tan estúpido por seguir esperando que alguien venga a rescatarme, a veces me gustaría irme bien lejos de aqui...y que a pesar de todas las cosas malas que tengo pueda encontrar alguien que me de un beso y un abrazo de cumpleaños.

Quiero que mis papás me regañen, que me hagan notar que no estoy pintado en la pared, que me volteen a ver sin tener que gritar, que alguien note que estoy aqui.
Quiero un papá que de verdad sea mi papá, no mi hermano caprichoso.
Por favor alguien abraceme y digan que todo mejora con la edad y que no hay que tener miedo de volvernos adultos y que yo no me voy a quedar solo.

Ya he tenido suficiente, necesito alguien que comprenda que estoy sola en medio de un montón de gente...

jueves, 17 de marzo de 2011

El escultor...O cómo aprendí a darme mi lugar


Se acuerdan del octavo wey que conocí el sábado? Resulta que es escultor, en realidad una especie de artista plástico, salí con él el lunes, nuestra cita consistió en sentarnos sobre Reforma, frente a la Diana, a platicar esperando a que llegara un amigo suyo por nosotros y de ahí lo acompañé a un taller a dibujar, ya saben dibujo natural, con una modelo que posaba impresionante...Al final escogió uno de sus dibujos y después de firmarlo me lo regaló.

Claro que no todo es tan maravilloso como puede parecer que es salir con una persona que se la pasa hablando de cosas interesantes, a pesar de parecer uno de los tanto personajes que he conocido a través de los libros que he leído, el artista "incomprendido" que siempre he considerado irresitiblemente sexy.

El también tiene novio, pero esta vez yo no estoy desesperado por enamorarme de alguien, ni es mi primer amor y (des)afortunadamente ya no soy tan inocente como para creer que si quieres a una persona es lo único que importa.
Así que después de disimuladamente cancelarme su invitación a su fiesta de cumpleaños por que va a estar su novio, al que supuestamente ya va a dejar (sí, aja) y preguntarme si celebramos en la semana, dije: No, yo no me merezco esto, no merezco a alguien que me quiera nada más a ratos, conmigo nada a medias.

Y es que, por qué la gente cree que un "affair" es lo que va a ayudarlos a mejorar sus jodidas relaciones? Es acaso el levantón de ego que te da saber que le gustas a alguien, es acaso la emoción de empezar a conocer a otra persona? Que lleva a la gente a buscar en una aventura algo que su relación ya no les da en vez de terminar bien con su maltrecha relación y buscar algo posiblemente mejor que lo que actualmente tienen? Por que escogerías a tu novio al otro lado del mundo, o al wey que no estuvo para celebrar tu cumpleaños por culpa de una pelea, en vez de escoger a una persona dispuesta a aventarse y que sea lo que Dios quiera?

Entonces le dije: Festejamos cuando cortes con tu wey, hablamos luego.
Y así, lectoras y lectores fue como por primera vez en mucho tiempo decidí respetarme y darme mi lugar (y aqui es donde ustedes empiezan a aplaudir)

lunes, 14 de marzo de 2011

Noche de copas, una noche loca...

Si algo me gusta de mi amistad con Heartless Twink es lo cómodo que me siento contandole mis cosas, desde mis dramas emocionales hasta mis más "bajas" perversiones y es que siempre me he sabido alguien extremadamente sexual.
Tras mucha insistencia de su parte, accedí a acompañar a mi igualmente pervertido amigo a Marrakech, con el prejuicio de que solamente iba a haber pura gente non-grata y mi sorpresa fue que habia una gran cantidad de weyes que me gustaron, el tipo medio rarito padre que me gusta pero con el que nunca podría casarme jajaja.

Recorrimos el lugar hasta llegar a la barra y mientras me tomaba una cerveza veía a los posibles prospectos de ligue, ultimamente me había sentido tan apagado, como si esa vibraa de sexualidad que alguna vez me dijeron que irradio se hubiera apagado, terminada la cerveza cruzamos la calle y entramos a La Purísima, un lugar tan kitsch que resulta casi imposible que no te guste o al menos cause alguna simpatía, mientras iba a comprar mi segunda cerveza una parejita me saludó y antes de seguir mi camino hacia la barra me pidieron un beso, empecé con el que más me había gustado, que fue el que me saludó y después de un rato como no queríendo dejar de lado a su novio lo acercó a nosotros y bueno, es obvio lo que siguió.

Ni siquiera estaba borracho y mucho menos drogado, pero tenía una especie de rush raro después de ese beso, desde hacía mucho tenía ganas de bailar algo que no fuera música electronica y al parecer el dj de Marra oyó mis plegarias pues tocó todo menos eso, baile al ritmo de Calle 13 y me puse eufórico cuando sonó Spice Up Your Life.

Resultó que la primera parejita que conocí iba con otro amigo al que también le guste y que también me gustó así que no me pregunten cómo pero hubo un momento en el que recuerdo tres pares de manos sobre mí mientras yo seguía moviendome al ritmo de Pitbull unos labios sobre mi nuca, unas manos abriendose paso entre mis briefs para llegar a mis nalgas y otro más con sus manos sujetandome la cabeza mientras nos besábamos, después de un rato empecé a bailar con mi amigo, sin otro afán que divertirme un rato, llegó un punto en el que nuestro baile hizo que me preguntaran si no había problema con mi novio y aclaré que sólo somos amigos...Y es que eso es lo que me gusta de Heartless Twink, me sentí liberado y tan capaz de hacer lo que se me pegara mi reverenda gana por que sabía que el no me iba a juzgar. Si hasta me confesó ayer que tuvo una erección cuando me vio agarrandome a los 3 weyes jaja

HT también ligo, así que mientras se comía (literal) a besos a su ligue en turno, decidí perderme entre la multitud y dejarlo divertirse un rato, así conocí a mi sexto ligue de la noche, por que después de los 3 amigos conocí a otra pareja con la que también me agasajé un rato bailando (por no decir fajando)

Cuando llegué al séptimo decidí parar, que ya había sido demasiado ligue para una noche, sin embargo después de una propuesta de HT pensé que no había octavo malo y justo en eso vi a un chacal de esos que siempre me han gustado pero no sabía de dónde sacarlo y me acerqué a saludarlo, y por saludarlo me refiero a decir "Hola". Nada más, pues ni siquiera me dio tiempo/ganas de preguntarle su nombre. Así fue como conocí a mi octavo ligue, de todos creo que fue con el que más química sentí o al menos más rico besaba.
Quería abrazar a mi amigo, agradecerle por ayudarme a liberarme de tanto desmadre emocional que traigo, aunque fuera por una noche y lo hice prometerme que pronto vamos a regresar.


A eso de las 4:30 cerraron el lugar y me fui sintiendome más ligero, tal vez era libertinaje lo que me hacía falta para relajarme un poco, sé que probablemente no es la mejor forma de recuperar la confianza después de una relación como la que tuve, sí, fue una noche, fue un rato de diversión...Pero me recordó que aún tengo encanto o algo parecido que hace que atraiga a los hombres. Al parecer a veces necesitamos perder un poco el control para después poder equilibrarnos, es que la rutina poco a poco nos atrapa y es cuando lo único que necesitamos para sentirnos mejor es bailar con completo desparpajo y conocer a cuanta gente se nos pegue nuestra gana.

jueves, 3 de marzo de 2011

Sale el sol...

Te lloré hasta el extremo de lo que era posible...

Hace dos semanas, justamente el 14 de Febrero tuve que ir con mi psicóloga por que me sentía peor que antes, otra vez falté a la escuela y con esfuerzos me moví hasta el consultorio de quién me atrevería a decir es mi salvadora. Después de tanto platicar y de comentar lo mal que me tenía el remordimiento de haber hecho lo que hice (que ya entendí que estuvo mal, pero no toda la culpa es mía) me dijo: Ve a hablar con Daniel, llámale desde otro número...

Por supuesto se me fue el alma a los pies, sin embargo era algo a lo que yo tenía dándole vueltas desde unas semanas atrás, creí que si ella lo decía algo de bueno tendría hacerlo, ya no eran mis ganas de ir a pedirle perdón, era una opción para poder seguir adelante con mi vida, para cerrar un ciclo y poder por fin dejarlo ir, dejarlo ir aunque sus fotos y sus mails estén guardados en mi computadora, hay personas que dejan marcas tan profundas en nosotros que no hay forma de borrarlas, en este caso, cómo borrar las huellas que mi primer amor dejó en mí?

Así que dos días después de mi visita al psicólogo y con una gran dósis de apoyo moral por parte de mis amigas de la escuela fui a casa de Daniel, no tomé un taxi como las otras veces, preferí caminar y dejar que el aire fresco me despejara un poco la mente, mientras iba tratando de ordenar en mi cabeza lo que iba a decirle, nada de escenitas, nada de arrastrarme a sus pies y pedirle que regresara conmigo.

Entrar a su condominio sin que le avisaran no fue difícil (Que pasó joven y ahora por qué quiere caerle de sorpresa al señor Daniel?) lo difícil por supuesto fue tocar el timbre y más aún ver su cara de que él tampoco lo estaba pasando nada bien.

Pedí perdón por lo que hice, por el daño, por la mala intención con la que mandé ese mail, me pidió que sigamos con nuestras vidas y yo le pedí un último abrazo, de esos de los que no te quieres soltar por qué sabes que probablemente nunca vas a volver a ver a esa persona, algunas lágrimas de mi parte, un "Por favor, no llores" de parte suya.

De regreso a mi casa lloré y a la mañana siguiente parecía que era lo único que quería hacer, aún así sentía una especie de alivio, de decir: Ya es lo más que puedo hacer para enmendar el error.
Y cómo él me dijo: No te guardo ningún rencor, de verdad deseo que seas feliz y que puedas seguir con tu vida, tienes que madurar, niño, sigue con tus planes.

Ya no soy su chamaco, ni el es mi señorcito, ni nos diremos chiquitín y tal vez si alguna vez lo vuelvo a ver ni siquiera nos atrevamos a saludarnos. Pero al menos ya no hay rencores, casi me atrevería a decir que sólo queda cariño entre nosotros y el recuerdo de nuestra historia juntos por toda esta ciudad, los "te amo", los abrazos, los mails interminables, las risas y nuestro año juntos. Ya no importa lo que hayamos podido hacernos, estoy seguro que esta vez podemos dejar el daño atrás.

Parece increíble, pero ya no soy el mismo que era antes de ese miércoles.

...Y un día después de la tormenta, cuándo menos piensas sale el sol...