viernes, 1 de julio de 2011

Mi primer millón...


Pues no les había contado, pero tengo 2 semanas trabajando para una agencia de Fashion Marketing y Relaciones Públicas. En realidad no tuve una entrevista de verdad, por que uno de los socios de la agencia fue mi maestro en tercer semestre, pero creo que el mérito de que me hayan invitado a trabajar ahí es todo mio.


En estas dos semanas ya viaje a la producción de una campaña de zapatos, participé en el lanzamiento de un nuevo tequila y hoy me pagaron mi primera quincena, todos y cada uno de esos pesos ganados por mí, sin extender la mano y pedirselos a papá.

Hoy tuve una junta con uno de nuestros clientes, una tienda multimarca de esas que venden objetos de deseo indecentemente caros, resulta que la tienda esta está en Polanco, así que mientras caminaba por el parque Lincoln para llegar a mi junta me llegaron los recuerdos de todas las veces que caminé por ahí con Daniel y mientras sentía como se me agolpaba la sangre en la cara y se me empezaban a aguar los ojos recordé el mail que me mandó el martes:

Estas en el momento de estudiar,
formarte y aprovechar la vida.
Asi que mientras me obligaba a respirar, recordé que por fin estoy tomando el control de mi vida nuevamente, que lo que estoy logrando lo estoy haciendo por mí y entendí, entendí que cuando me dé cuenta que todo lo viví no es más que una historia pasada. Que ya no está pasando, que la historia que me estaba contando ese parque no era más que un puñado de recuerdos, que cuando pudiera guardarlos y dejarlos atrás, entonces decidiría quien voy a ser a partir de ahora. Al final lo único que me mantiene anclado son los recuerdos, mismos que poco a poco voy guardando en un apartado en mi cabeza, para poder revisarlos más tarde, cuando ya no sean más que una pequeña fracción de mi pasado y no me causen dolor.

Tengo un trabajo, tal vez no sea el trabajo "por el que un millón de chicas matarían" pero es algo que obtuve gracias a mis méritos, en el que me han dicho que están contentos con lo que hago, un trabajo que hago sólo para mí, porque a mí me gusta y me genera satisfacción. Creo que estos es lo importante, que decidiera tomar el control y decidir quién voy a ser ahora, que aunque aún no sepa como me voy a construir como persona al menos ya estoy decidido a hacerlo y me doy cuenta que los recuerdos son sólo eso, que esto es historia pasada y que ahora sólo me queda el futuro. Mi primer quincena me causa tanta satisfacción como si fuera mi primer millón.

Aqui es donde Cher empieza a cantar You haven't seen the last of me