viernes, 31 de diciembre de 2010

Hierba Santa


Si algo he aprendido este año gracias a Alexandra Scheiman y a Frida Kahlo, pero más a Frida es que no importa lo que nos pase siempre tenemos razones para seguir adelante.

Alexandra Scheiman es la autora de "El libro de Hierba Santa", creo que una de las mejores cosas que me regaló Daniel, este libro nos cuenta la historia de Frida Kahlo, por cultura general todos saben que el camión donde viajaba Frida cuando era joven fue arrollado por un tranvía, fracturandole la columna y dejandola lastimada para siempre. En una especie de historia fantástica Alexandra nos cuenta como Frida negocio su muerte con la propia Muerte, a quién después llamaría Madrina...La muerte aceptó a cambio de que año tras año Frida pusiera una ofrenda de día de muertos dedicada a ella, advirtiendole que si regresaba a vivir después de ese accidente su vida iba a estar llena de sufrimientos y bueno, todos sabemos que a Fridita no le fue muy bien en la vida. Sin embargo al llegar a su segunda muerte Frida le reclama a su Madrina por haberla tratado tan duramente en la vida, la Muerte le muestra como habría sido la vida de las personas que conoció si ella hubiera muerto en el accidente del tranvía y le deja ver la huella que dejó en todas esas personas, dandole nuevamente la opción de morir en el tranvía o seguir con su vida, Frida escoge la segunda opción.

A lo que quiero llegar con esto es que muchas veces nos damos cuenta sólo de las cosas malas que nos pasan y no olvidamos de lo bueno, después de hacer un profundo analisis de este año que creía verdaderamente jodido, me di cuenta que no fue malo, he conocido a personas increíbles, por fin estoy estudiando lo que quiero, ya no tengo clases que no me interesen, descubrí que mis papás me apoyan en todo (esto ya lo sabía, pero después del apoyo que me mostraron cuando corté con Daniel me lo aseguraron), conocí el amor, por que a pesar de todo este año fue la primera vez que me enamoré, aunque también perdí a un compañero muy importante este año, a mi perro. Después de 16 años con nosotros Peque ya se fue al cielo de los perros, ojalá allá ya tenga bien su patita y pueda comer tooooodo lo que se le antoje.

En fin, este año ya se acabó, a pesar de mi desastrozo final con Daniel que ya no puedo arreglar, ojalá le vaya bien con su novio, ojalá que todas las personas que hayan podido lastimarnos encuentren lo que buscan en sus vidas, ojalá yo por fin encuentre un equilibrio emocional.
Sé que generalmente todos hacen propósitos para el año nuevo, yo tengo dos metas muy importantes para este año: ir a estudiar a Barcelona y estar en paz conmigo, tranquilo y sin dramas, aunque sea por un año. Un año tranquilo. Espero poder por fin tener un cuarto limpio y ordenado y que se me deje de caer el pelo.

Ojalá que Jaqueline por fin se arregle con su novio, que mi hermana por fin pueda encontrar un espacio al que pueda llamar "Mi casa", que mi papá encuentre una forma en que deje de caersele el pelo, que mi otra hermana por fin encuentre un wey que la quiera bien y que mi mamá pueda seguir viajando, que es lo que más le gusta. Que mi sobrino ya no crezca, por favor, me gusta así chiquiti como es, no quiero que deje de ser un inocente niño.
Por favor también que se acabe la violencia en el mundo, que ya estrenen "Rio, Eu te Amo", que en México por fin haya una plataforma de moda decente, que Fangoria vuelva a México, que Almodovar haga otra pelicula con Penelope y que por fin mi blog vuelva a tener un banner (ya no puedo ponerselo u.u).

Este post podría ser onda Bridget Jones: 120 libras, 100000 cigarros, un año después y otra vez sola. Pero mejor ser optimistas, sigo en mi eterna búsqueda del amor verdadero, ya llegará, mientras puedo irme construyendo como persona y aprender a disfrutar de estar sólo. Ojalá pronto deje de extrañarlo, ojalá pronto deje de hacerme falta y ojalá pueda seguir sin él.

Ojalá tanta gente pueda ser como Frida y a pesar de todo lo malo que les haya pasado aún puedan pintar un cuadro o hacer algo que puedan titular "Viva la Vida", ojalá que este 2011 nos dé aún más razones para seguir vivos, no importa lo que nos pase, incluso si nos arrolla un tranvia poder levantarnos y poder seguir diciendo "viva la vida".
Gracias a todos los que han seguido en este viaje, gracias a toda le gente que ha aportado algo a mi vida, sobretodo gracias a Frida por enseñarme a seguir a pesar de todo.

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