martes, 3 de noviembre de 2009

Last morning a hunk saved my life.


Era lunes por la mañana y yo ya llevaba un ratote bailando, Filipe Guerra ya se había bajado de las tornas y a mi ya se me estaban pasando los efectos especiales cortesía de Mr. Candyman..."Me quiero sentar" Tenía ganas de sentarme pero no así de alejarme de la fiesta y de la gente con la que iba así que termine sentadito en la alfombra del antro.
De pronto mientras me abrazaba las rodillas en un intento de estirar mi espalda llegó él, un ejemplar de hombre alto como la vida misma (yo le calculo 1.85), va a sonar a mucha mamada jaja pero era como una especie de aparición entre luces, musica (cortesía de DanceMusicDiva) y humito patrocinado por los fumadores y el antro, me sonrió y yo todavía arriba me pregunté "Es a mi?" Me hizo señas para que me levantara y extendí los brazos, me ayudo a levantarme y de pronto me abrazo...Que pasa? Que hace el wey abrazandome a mi? derrepente empecé a sentir unas manos fuertes masajeandome la espalda, yo seguía abrazado al wey sin saber que pasaba, sus manos siguieron dandome masaje un rato hasta que me dijo "Espera, todavia no acabo eh?" mientras me agarraba de las muñecas y estiraba mis brazos hacia arriba, al final con otra sonrisa nada más me pidió un beso y así como llegó se fue...
En ese momento yo nada más pensé "Que buena onda" la ultima vez que fui al baño me lo encontré afuera y me pregunto Cómo sigues? Ya mejor? yo solo contesté Si, muchas gracias...Le pregunte su nombre y me despedí de él...
Ya en mi casa después de haber dormido unas cuantas horitas y que mi cerebro empezara a funcionar correctamente pensé: Wey no mames que buena vibra de ese wey...Yo la neta si viera a alguien así en el antro ni lo pelaría o tal vez solo me dignaría a voltear a verlo con indiferencia y después me iría.
Hacen falta más mamados así en el antro, no solo los clasicos weyes que se mamonean cabrón, bueno en realidad creo que hace falta más gente con buena vibra en el mundo, no solo mamados en el antro...Amén